Descubre cómo nacieron las "Marquesitas"

Desde 1907 

Don Pablo Alguacil fue el fundador de la confitería "La Positiva" y quien inventó "Marquesitas".  Aprendió el oficio del confitero trabajando en una confitería toledana llamada Casa Pérez, que estaba situada frente a la Puerta Llana de la Catedral. 

En 1907 decide establecerse por su cuenta, abriendo su propia confitería en Bargas, en la que en sus orígenes no solo vendían dulces, sino también comestibles, vinos y licores, además de los productos de  confitería.  La puerta de este establecimiento se convirtió en lugar de parada obligada para los coches que transportaban viajeros a la estación de ferrocarril. Algo después se abre una cantina en dicha estación Bargas, donde se vendían los mismos dulces a los pasajeros de los trenes que paraban. Fue en estos primeros años del siglo cuando Pablo Alguacil inventó las "Marquesitas". Los productos que utilizaba para su elaboración, principalmente almendra y azúcar, los recibía por ferrocarril.

Se molían ambos ingredientes en una maquina de moler manual y se agregaban los huevos, que habían sido conservados en una tinaja de barro y cubiertos de agua y sal. Finalmente, la masa de las "Marquesitas" se cocía en un horno calentado con retama. 

Las "Marquesitas" se patentaron en el Registro de Propiedad Industrial y poseen Marca Registrada - Marquesitas® - desde 1924.

Al inicio con el número 50.921. A día de hoy el número de registro es NUM. 3.083.240.

La fórmula secreta de su elaboración se ha venido transmitiendo de padres a hijos hasta la cuarta generación.

Las "Marquesitas" son unos dulces de textura fina que desde entonces hasta hoy se han seguido elaborando se forma artesanal.